La declaración de metas “posteriores al secundario” y los servicios de transición deben relacionarse directamente con las metas del alumno después de la educación secundaria. También debe demostrar cómo se vinculan los estudios planificados con tales metas. Por ejemplo, el alumno que manifiesta interés en continuar una carrera en ciencias de la computación puede tener una declaración de las necesidades de servicios de transición vinculada con un curso de trabajo en el área de la tecnología. Otra declaración de las necesidades de servicios de transición de un alumno podría describir las razones por las que la capacitación en materia de transporte público es importante para garantizar su futura independencia en la comunidad. La meta es seleccionar los cursos de estudios que serán significativos para el futuro del alumno y lo motive a completar su educación.
Como otros servicios de educación especial, los servicios de transición y las actividades deben ser proporcionadas en el ambiente menos restrictivo. Los alumnos deben participar en los programas de educación de la escuela secundaria similares a los de sus pares sin discapacidad y de la misma edad. Por ejemplo, un alumno puede participar medio tiempo o tiempo completo en las clases de educación común de la escuela secundaria, con el apoyo del “programa de inclusión”. Los maestros de educación especial, asistentes paraprofesionales y proveedores de servicios colaboran con los maestros de educación general para adaptar el programa de estudios y brindar instrucción individualizada dentro de estos entornos integrados, a los fines de permitir que el alumno logre las metas del IEP. Además, el alumno puede comenzar a tomar parte de una experiencia laboral individualizada, funcional e integrada, tales como capacitaciones en el lugar durante un período, uno o dos días a la semana. La capacitación puede llevarse a cabo dentro y fuera de las instalaciones de la escuela secundaria.